Alternativas

Ma?ana ser? instalada en Venezuela la Asamblea Nacional electa el pasado 6 de diciembre. Esa elecci?n, que cont? con una extraordinaria participaci?n (74%) de los votantes, abre un dif?cil camino para la pac?fica recuperaci?n de la democracia y el bienestar.

El amplio triunfo de la oposici?n, que eligi? dos tercios de este parlamento, cambi? las reglas del juego que por 17 a?os imperaron en ese pa?s.

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Pero el poder chavista ha actuado de diversas maneras para reducir las competencias que constitucionalmente corresponden a la Asamblea Nacional, e impedir que funcione la nueva integraci?n de los ?rganos estatales.

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Con posterioridad a esa elecci?n se cre? un parlamento comunal sin sustento constitucional, entreg?ndole espacios f?sicos de la Asamblea Nacional que entrar? en funciones, y a la cual se trata de arrebatarle competencias.

Se nombr? Defensora de los Habitantes a la jueza que, sin consideraci?n al debido proceso, impuso una pena de casi 14 a?os de prisi?n -por pol?tica- a Leopoldo L?pez.

Se corri? a nombrar y juramentar a 13 magistrados principales y 21 suplentes del Tribunal Supremo de Justicia por un pretendido per?odo de 12 a?os, para lo cual se aprobaron jubilaciones anticipadas de miembros anteriores.

Y para colmo de males se presentan 6 impugnaciones ante la Sala Electoral del TSJ -que estaba en receso- contra elecci?n de diputados de la oposici?n. Quienes han tenido el control del proceso electoral con 4 de los 5 rectores del ente electoral; quienes han abusado del Estado, sus recursos y la capacidad de crear miedo; quienes han monopolizado los medios de comunicaci?n pretenden con sus impugnaciones y medidas cautelares impedir que la oposici?n tenga la mayor?a calificada de la Asamblea Nacional. Y la Sala Electoral ya orden? suspender de manera preventiva e inmediata a tres diputados oposicionistas de Amazonas, lo que la oposici?n no respetar?.

Estas maniobras para conservar la concentraci?n de poderes no democr?tica que ha regido en Venezuela hace a?n m?s dif?cil la cohabitaci?n de poderes con visiones pol?ticas diferentes que regir? a partir del 5 de enero.

Antes de esta elecci?n domin? en Venezuela la total concentraci?n del poder del populismo del ?socialismo del siglo XXI?.

La elecci?n parlamentaria del 6 de diciembre cambia ese estado de cosas. Hay ahora una Asamblea Nacional independiente con amplio respaldo popular, que defender? sus competencias constitucionales.

Las circunstancias actuales de Venezuela demandan acciones de esa Asamblea Nacional en importantes frentes: el desabastecimiento que amenaza con una posible emergencia social; la situaci?n insostenible de los presos pol?ticos; la ausencia de libertades p?blicas y el control estatal de los medios de comunicaci?n; el atroz nivel de la criminalidad; el despilfarro de los recursos petroleros; el dominio por el Poder Ejecutivo de los otros poderes estatales y de los organismos de control; la confusi?n entre el Estado y el partido chavista.

Para poder enfrentar con ?xito estos muy graves problemas, el chavismo y la oposici?n democr?tica deber?n actuar con mucho esp?ritu patri?tico, paciencia y perseverancia, y es esencial que la oposici?n mantenga la unidad de prop?sitos que la llev? al triunfo electoral. Claro que a este fin no contribuyen las acciones abusivas del gobierno chavista, posteriores a las elecciones parlamentarias.

En defensa de la democracia y los derechos humanos en Venezuela, y para facilitar a los venezolanos que puedan enfrentar con ?xitos las graves circunstancias de falta de abastecimiento y elevad?sima criminalidad, los organismos internacionales deben prestar la atenci?n debida y ejercer el liderazgo moral que de ellos se espera.

Los expresidentes de Am?rica Latina y de Espa?a organizados alrededor de IDEA deberemos mantener nuestros esfuerzos para que la opini?n p?blica internacional sea consciente de la situaci?n venezolana. Los dem?cratas debemos serlo en todas partes.