Alternativas

Nuestro gobierno rompi? una red ilegal de tr?fico de cubanas y cubanos, y en un gesto humanitario que lo honra, abri? la frontera a las personas que con enormes sacrificios y trabajos salen de Cuba a Ecuador e inician una traves?a de la mitad de Am?rica buscando libertad y oportunidades en los Estados Unidos.

El gobierno de Nicaragua tom? la inhumana decisi?n de negarles el tr?nsito por su territorio. Lo hace cuando estas personas no pagan para su traves?a el costo de los ?coyotes? que -ilegalmente- lucran con las necesidades de las personas que se mueven en la clandestinidad. Pero miles han pasado cuando imperaba el tr?fico ilegal de personas.

Los costarricenses debemos sentirnos orgullosos de la generosidad con la cual los queridos vecinos de La Cruz en Guanacaste y en muchas otras comunidades han dado abrigo y amistad a estos hermanos que buscan un hogar libre para desarrollarse. Hoy tenemos en albergues en Costa Rica un n?mero mayor de personas que en cualquiera de las emergencias provocadas por la naturaleza.

El se?or presidente Luis Guillermo Sol?s, el ministro de Relaciones Exteriores, Manuel Gonz?lez, y todas las autoridades con esmero e inteligencia han atendido los problemas de estos cubanos y han luchado arduamente por solucionarlos. Pero para permitir su tr?nsito hasta que sus pies toquen suelo de Estados Unidos, dependemos de otros gobiernos, y no es culpa de nuestras autoridades si algunos han mostrado falta de sensibilidad humana.

En esta hora debemos recordar a los abuelos de nuestros abuelos, y a nuestros padres. Cuando luchaban por su independencia Antonio Maceo y sus amigos encontraron hogar en La Mansi?n de Nicoya en tierras del Estado. En San Jos?, Jos? Mart? y M?ximo G?mez prepararon con Maceo su ?ltima batalla en la Isla. Don Pepe Figueres en el fulgor y jolgorio del triunfo de la Revoluci?n le reproch? los fusilamientos a Fidel Castro, en su propia cara en La Habana. En el gobierno de don Rodrigo Carazo se logr? la liberaci?n del compa?ero de luchas de Fidel, Huber Matos, despu?s de estar en prisi?n 20 a?os. Tuve el honor de luchar desde Costa Rica en compa??a de j?venes dem?cratas por la liberaci?n y salida de la Isla de los hermanos Arcos, otros compa?eros de Castro en Sierra Maestra tambi?n encarcelados.

Si las gestiones de nuestro gobierno no alcanzan para que los cubanos y cubanas peregrinos por nuestra patria en pos de la libertad lleguen a su deseado destino, ofrezc?mosles hogar en nuestra tierra. Muchos de ellos tienen familiares con recursos para ayudarlos a establecerse. Muchos son profesionales que aportar?n sus conocimientos. Todos son esp?ritus libres, con deseos de surgir, valientes y con mil atributos para ser valios?simos trabajadores por el desarrollo nacional, que generar?n muchos m?s puestos de trabajo que los que ellos ocupen.

Adem?s de continuar mostrando grandeza de esp?ritu, hasta es de provecho ser generosos y hospitalarios con estos cubanos y cubanas que luchan valientemente por su libertad y su progreso.