ALTERNATIVAS
Miguel Ángel Rodríguez E.
La Asamblea Legislativa se honra al nombrar ciudadano de honor a don William Gómez, un sincero amante de su patria, un periodista visionario y cercano al pueblo costarricense, un exitoso empresario.
La propuesta para rendir este merecido homenaje a don William Gómez la realizó un grupo de diputados y diputadas de seis diferentes partidos políticos en enero del año pasado.
En la exposición de motivos de la iniciativa de estos honores, los proponentes señalaron: “Un caso merecedor de reconocimiento por parte del parlamento es sin duda alguna la vida y obra del periodista y empresario William Gómez Vargas, ejemplo de superación gracias al esfuerzo, dedicación y trabajo tesonero del periodista y empresario que logró no sólo fundar un grupo periodístico de éxito, sino forjar un estilo de periodismo seguido por miles de costarricenses que al día de hoy confían en ese estilo y legado”.
En la Asamblea Legislativa se realizará un acto en celebración de la declaración de don William Gómez como ciudadano de honor. Este homenaje es más que merecido.
El ejemplo de visión, de capacidad empresarial, de sintonía con el sentimiento nacional, de trabajo tesonero que nos legó don William es admirable. Levantó su importante grupo empresarial con gran visión, innovando sin temor y asumiendo riesgos y con enorme capacidad de entender y armonizarse con los sentimientos del costarricense.
Pero a la par de esa visión y de ese difícil arte de entender los sentimientos profundos de sus coterráneos, construyó sus empresas en periodismo, radio y televisión con trabajo dedicado, constante, perseverante, en algunas ocasiones verdaderamente heroico por el esfuerzo y el sacrificio que tuvo que empeñar para vencer grandes dificultades.
Son increíbles sus historias de participar buscando la información, redactando noticias y columnas, diagramando sus productos, vigilando la impresión y seguir trabajando en las madrugadas para diseñar y construir las rutas de distribución de sus periódicos, para que pudiesen ser vendidos al pregón a la hora que era preciso para adelantarse a su competencia.
No puedo dejar de mencionar su valentía.
Cuando estaba convencido de la bondad de una tesis la apoyaba sin miramientos. Cuando después de sesuda y tranquila reflexión consideraba negativo un proyecto o un evento, no temía denunciarlo. Por eso se constituyó en un verdadero y leal defensor de la libertad de opinión y de prensa.
Yo no tengo cómo expresar la profunda gratitud que mi familia y yo sentimos por don William, quien en las horas más duras y crueles de la persecución masiva en mi contra se enfrentó a ella y a sus propulsores con su lucidez de pensamiento, con su enorme valentía espiritual y con su pluma privilegiada.
Dios le recompense a don William tanto que hizo y sigue haciendo a través de su familia y de sus medios por nuestro país.
Fecha de publicación: 8-Mayo-2023
Fuente: diarioextra.com