ALTERNATIVAS
Miguel ?ngel Rodr?guez E.
Si esas normas se imponen de espaldas a las realidades del mercado, se generan efectos secundarios perjudiciales a mediano plazo para los propios trabajadores y en especial para las personas m?s pobres. Tal es el caso de una pol?tica de desproporcionados aumentos de los salarios m?nimos.
Supongamos que esos salarios se aumentan en un 25% con una inflación de 5% y sin aumento en productividad. ¡Qué buena noticia para miles de trabajadores que reciben como pago apenas el salario mínimo! Aumentará considerablemente su poder de consumo y su bienestar e incluso su felicidad.
¿Pero serán solo esos sus efectos?
Las empresas en las que el aporte de sus trabajadores menos productivos apenas cubría su salario mínimo anterior al aumento, procederán a despedirlos y aumentará el ya muy elevado desempleo. Proyectos de inversión que eran marginalmente rentables con los salarios anteriores dejaran de serlo y no se ejecutarán. Se harán más atractivas tecnologías que usan menos trabajo y más capital o recursos naturales, y será esa otra fuente de aumento del desempleo. Volverá a incrementarse el diferencial frente a Nicaragua en los salarios para ocupaciones poco calificadas, lo que renovara la inmigración y la oferta laboral, creando más desempleo y mayor violación al pago de salarios mínimos, sobre todo de pequeñas empresas de difícil supervisión.
Los trabajadores mejor calificados gozan de salarios superiores a los mínimos, y por ende sufrirán en mucha menor medida el desempleo. Disminuirá la desigualdad entre ellos y los empleados con menores calificaciones, pero aumentará la desigualdad entre los que conserven su empleo y los que lo pierdan.
El Informe Mundial de Salarios 2009-2010 de la OIT señala: "Para los empleadores individuales, un aumento salarial que no vaya acompañado por la correspondiente alza en productividad puede ser problemático, particularmente en tiempos de mayores presiones competitivas."
¿Qué pasará respecto al sector público? Pues indudablemente el ya muy alto déficit aumentará. Las condiciones actuales con los pluses en ese sector hacen que cualquier aumento a la base del salario se magnifique en su efecto final, y aunque para ese sector el aumento sea la mitad de ese 25% el déficit fiscal ya insostenible del 6% podría alcanzar hasta un 8% obligando a que suban más las tasas de interés y la inflación.
Como los pobres serán mucho más pobres por el aumento en el costo de la vida, se deberán gastar todos los recursos de Asignaciones Familiares que usualmente se sub-ejecutan por el problema del déficit fiscal, y esto agravará ese déficit y la inflación subsecuente.
Todo eso se puede hacer por el Poder Ejecutivo sin una sola ley y sin chance de control judicial.
Fecha de publicación: 6-Ene-2014
Fuente: diarioextra.com