Imprimir
Categoría: Alternativas
Visto: 1254

ALTERNATIVAS

Miguel ?ngel Rodr?guez E.

Dr. Miguel Angel Rodriguez Echeverria

Para usar con eficiencia los importantes recursos que se destinan a los programas sociales, es necesario mejorar sustancialmente su coordinaci?n y someterlos a evaluaciones peri?dicas que permitan rendir cuentas y arribar a conclusiones objetivas sobre su conveniencia en relaci?n a sus costos.

Tenemos un archipi?lago muy desintegrado de islotes con poca comunicaci?n entre s?, y muy celosos de su independencia.

Recuerdo las enormes dificultades que experiment? cuando simplemente pretend? que la CCSS y el INS compartieran informaci?n sobre los trabajadores afiliados, pues ten?amos indicios de que sus patronos declaraban en una instituci?n y no en la otra, o que indicaban diferentes salarios.

Otro ejemplo. Al final del gobierno se hab?a logrado acuerdos entre el IMAS y una serie de instituciones del sector social para que utilizaran el SIPO para focalizar a la poblaci?n meta sus beneficios, pero muy pronto se dejaron vencer y no se continu? usando ese instrumento destinado a lograr que los recursos llegaran de verdad a las familias pobres.

Cada gobierno se inventa alg?n mecanismo de coordinaci?n pero ninguno se formaliza, y nos vivimos volviendo a inventar el paraguas.

Por eso para lograr usar eficientemente los importantes recursos destinados a disminuir la pobreza que obstinadamente se mantiene en alrededor del 20% (21,1 % seg?n la reciente Encuesta de Hogares para 2018), es muy conveniente establecer mecanismos de coordinaci?n que le den una conducci?n unitaria a esa pl?yade de programas sociales (m?s de 50) y logren una mayor eficiencia en el uso de los recursos mediante las complementariedades que se pueden dar entre ellos.

He venido se?alando, por ejemplo, las enormes ventajas que se podr?an realizar si se utilizaran los EBAIS para constatar y mantener al d?a el Sistema Nacional de Informaci?n Social y Registro ?nico de Beneficiarios que permitir?a una mejor direcci?n de los recursos hac?a los pobres. Tambi?n para para asegurar la alimentaci?n a los infantes menores de cinco a?os, desde su nacimiento, y guiar a sus padres para que les proporcionen est?mulo intelectual y afectivo: ?besos y leche?.

En este campo ser?a muy oportuno que el gobierno del PAC -siguiendo la inspiraci?n de su fundador don Ott?n Sol?s y de otros antes de ?l- prepare una propuesta para refundir en una sola instituci?n todos los programas dirigidos a ayudar a las familias pobres, excepto los de educaci?n y salud, con lo que se podr?a lograr un importante ahorro en gasto administrativo, una mejor coordinaci?n de los programas, una eliminaci?n de duplicidades y se podr?a hacer llegar una mayor cantidad de recursos a las familias pobres.

Adem?s, es necesario institucionalizar la evaluaci?n y el rendimiento de cuentas de los programas sociales de una manera efectiva y transparente; lo que no se hace a pesar de que existe obligaci?n constitucional de hacerlo.

Desde el a?o 2000 se aprob? la reforma al art?culo 11 de la constituci?n pol?tica para incorporar la siguiente disposici?n: ?La Administraci?n P?blica en sentido amplio, estar? sometida a un procedimiento de evaluaci?n de resultados y rendici?n de cuentas,..?

En la administraci?n de don Jos? Mar?a Figueres se hab?a creado el SINE (Sistema Nacional de Evaluaci?n) que en la nuestra se aplic? a todas las instituciones aut?nomas y ministerios, mediante un sistema de compromisos anuales de ejecuci?n de tareas entre cada jerarca y el presidente de la rep?blica, y se dieron a la publicidad sus resultados. En el ?ltimo a?o se hicieron, de previo, p?blicos los compromisos.

En octubre de 2001 se aprob? la Ley de la Administraci?n Financiera de la Rep?blica y Presupuestos P?blicos que tiene como uno de sus objetivos el apoyo a la evaluaci?n de la gesti?n p?blica. Esta ley establece: ?Art?culo 5: Los presupuestos deber?n expresar con claridad los objetivos, las metas y los productos que se pretenden alcanzar, as? como los recursos necesarios para cumplirlos, de manera que puedan reflejar el costo? y en el art?culo 52 ??incluir?n los elementos explicativos necesarios para medir la efectividad de los programas, el costo unitario de los servicios y la eficiencia en el uso de los recursos p?blicos??

El SINE se redise?o a finales de la segunda administraci?n de don ?scar Arias y en el 2011 en el gobierno de do?a Laura se obtuvo la colaboraci?n de la agencia de cooperaci?n alemana para mejorar las capacidades de evaluaci?n. Pero muy poco se ha avanzado.

Utilizar y hacer p?blicos los datos del SINE tiene un alto costo pol?tico, pues los medios y los adversarios solo resaltan los casos de incumplimiento de metas. Pero hacerlo es indispensable, aunque insuficiente.

A pesar de toda esa normativa no existe un sistema integrado que mida no solo la eficacia (cumplimiento de metas) sino tambi?n y principalmente la eficiencia (costo de obtener las metas). El SINE solo mide si se han cumplido y en qu? proporci?n.

Para completar la tarea urge contar con un sistema permanente de medici?n de costos unitarios de los programas sociales, compararlos con los de otros pa?ses y los del sector privado y tambi?n con sus beneficios.

Adem?s, para valorar el impacto relativo de los diversos programas sociales, es muy conveniente utilizar el sistema de prueba controlada aleatoria (RTC por sus iniciales en ingl?s). Esto es, comparar las ventajas que obtienen las familias pobres que utilizan cada programa en comparaci?n con otras familias seleccionadas al azar que no los reciben y forman parte de la misma poblaci?n.

As? s? sabr?amos como emplear cada col?n de gasto social de la manera que nos rinda el mayor beneficio en disminuci?n de la pobreza.

Miguel Angel Rodr?guez

Ex Presidente de la Rep?blica

Fecha de publicaci?n: 22-Octubre-2018

Fuente: diarioextra.com